Hay mucho por decir y más aún por hacer. Esta mañana desperté con ganas de hacer un recuento de lo que hemos pasado durante el 2010 y haciendo un paralelismo de lo último que nos había preocupado el año 2009. La verdad que las cosas no han cambiado mucho, tampoco han mejorado. No sé si ha empeorado, pero lo que sí es concreto, es que las cosas siguen tan campantes y sonantes como el año pasado.
Los problemas indígenas, los campesinos sin sitio para trabajar la tierra, las calles de Asunción siguen en mal estado, los jóvenes siguen sin ser atendidos y sigue la lista, en muchos post que recordábamos del mes de diciembre del año pasado.
Los mismos vicios de hace diez, veinte, treinta y cuarenta años, siguen muy arraigadas en nuestras practicas cotidianas. Cuesta mucho aún luchar contra la corrupción económica, pecuniaria, tráfico de influencias, manipulación de ideologías...
Tenemos dificultades que siguen latentes en cuanto a educación. Este año han rechazado presupuestos destinados a la actualización tecnológica en los centros educativos públicos del país, tanto primarios como secundarios, han rezagado a la juventud con el mismo presupuesto de una indignante suma de poco mas de cuatrocientos guaraníes [cerca de medio centavo de dólar americano]. Las calles y avenidas de la "Capital del País" están sumidas en sendos baches que día tras día solo causan accidentes y peligran la vida de los ciudadanos. La falta de empleo, en especial la juvenil; también es una deuda que el estado tiene con los ciudadanos. A parte de generar nuevos empleos es necesario crear condiciones dignas para los que ahora viven con apenas un dólar por día y para aquellos que no alcanzan el sueldo mínimo siquiera, en compensación de los sueldos jugosos de los diputados y senadores a "quienes no les alcanzan 26 millones de guaraníes mensuales". Las simetrías tecnológicas entre los medios de comunicación global y las alternativas. Unas tienen muchísimas posibilidades de expansión, e incluso de inversión, mientras que las otras siquiera pueden "trabajar tranquilas" a causa de intervenciones cotidianas del ente regulador. También se habla de tecnología derrochada, como lo es aquella inversión en la plaza Italia de la capital del país. ¿Quién ha decidido sacar su laptop para usar el Internet inalámbrico existente en esa zona?. Otras de las falencias mas destacables y resaltantes del año es el tema de seguridad, tanto local como nacional. La Policía Nacional, poco o nada ha hecho para paliar esta situación, en cambio vemos personal uniformado frente a empresas privadas, sirviendo de guardaespaldas a personas particulares, atendiendo con gusto y mensajeando a diestra y siniestra en móvil celular, tomando tereré en las esquinas, juntando "mujeres" a su alrededor sin dejar de lado las muertes que han ocasionado en las múltiples "intervenciones durante las operaciones" de alto riesgo y las cotidianas.
Y qué hay en cuanto a las operaciones con el exterior, los problemas del campo, la mecanización de los cultivos, los agro - químicos, los adultos mayores, los excombatientes, las falencias del sistema de salud... Realmente hemos quedado estancados en el tiempo y en el espacio. Muchas personas han dado su voto de esperanza a los gobernantes que hasta el momento poco o nada han hecho para concretar por lo menos una de sus promesas, la mas importante de todas "el cambio".
Terminamos este año con muchas esperanzas mas. Que el año que sigue, sea aún mejor que que éste que va. Esperamos que a todos pueda llegar a salpicar por lo menos la verdadera "equidad" en todos los ámbitos, que hasta ahora goza de muy mala salud. Nuestro deseo es que todos desde el sitio en el que nos encontramos podamos mejorar -no solo un poquito- y avanzar mucho mas hacia una sociedad mas justa, solidaria, participativa y por sobre todo honesta y sincera.